A nuestros perros les gusta estar frescos en verano, pero no a todas las razas es recomendables quitarles el pelo por completo puesto que el propio manto de pelo hace de protector, así que lo recomendable es descargarlo y dejar que el perro vaya mas ligero, sin llegar a raparlo completamente.

Sin experiencia como peluquero, uno puede pelar al perro teniendo un cortapelos para mascotas al que se le pueda poner un recalce o peine separador para salvaguardar la altura del pelo.

Lo que hace este recalce separador es precisamente evitar que la cuchilla del cortapelo roce la piel del animal, manteniéndola levantada a la altura del recalce, de forma que sea esta pieza en forma de peine la que se deslice en contacto con el cuerpo del animal, manteniendo el cabezal y la cuchilla justo a al altura de corte de pelo, por eso es importante comprar un cortapelo canino que lleve o varios recalces de distinto tamaño o un sistema regulador de la altura.

Con el recalce puesto, es facil igualar el corte de pelo , aunque en pequeñas zonas es recomendable el uso de un  cortapelo de retoque canino que sirve para recortar y repasar pequeñas zonas donde la máquina grande no llega o donde nosotros no nos atrevemos  a pasarla, sobre todo en la cara del animal, en las patas, y en la zona de los oídos.

Indudablemente, el funcionamiento de un cortapelo para mascotas es el mismo que el de un cortapelo doméstico, aunque ambas máquinas tienen distintas características técnicas que se tienen en cuenta a la hora de diseñarlas, pero en los cortapelos para las personas también se incluyen estos recalces o peines separadores, porque la función es exactamente la misma, regular la altura del corte de pelo.