El peor enemigo de los aparatos eléctricos son los líquidos, ya sea agua u otros que además pueden ocasionar un daño aún mayor, aunque también pueden estropearse con los cambios de tensión si no llevan un sistema específico que los proteja.
Los fabricantes de cortapelos, y otros aparatos eléctricos que se utilizan en la peluquería, saben que accidentalmente puede derramarse el agua u otros líquidos y se pueden mojar los circuitos, ya que todos estos aparatos se usan en salones de peluquería donde se trabaja con agua, tintes y productos químicos.
Incluso los aparatos domésticos también están expuestos en menor medida porque se usan menos, pero generalmente estos se usan en lavabos y cuartos de baño donde suele haber agua y líquidos que se utilizan para el pelo.
Además algunos cortapelos funcionan con baterías y por tanto también es una pieza de la máquina que hay que proteger, puesto que es posible que si se moja, lo que se estropee sea la batería y no la máquina.
Dicho esto, los fabricantes suelen prever la caída accidental del agua y diseñan carcasas estancas pero que en ningún caso son impermeables si no lo especifican en sus características técnicas,
La caída accidental del agua, si no es mucha puede limpiarse antes de que penetre en el interior y evitar que moje los circuitos.
Lo mismo sucede con otros aparatos como secadores de pelo o planchas para el cabello, pues todos tienen una carcasa, generalmente de material plástico, pero como decimos, pocos son los aparatos totalmente impermeables, y mucho menos sumergibles.
Un secador tiene aberturas que comunican el exterior con el interior del aparato, y difícilmente podría crearse un secador que fuera totalmente resistente al agua.
Que hacer en caso de que nuestro aparato caiga al agua
Si en lugar de un derrame de líquido, ocurre que nuestro aparato de peluquería cae al agua, hay que tener en cuenta sobre todo el riesgo de que se produzca un accidente por el contacto inminente del agua con los circuitos eléctricos.
Si en la casa o en el local donde estamos utilizando el aparato eléctrico, cuenta con un sistema de protección, enseguida saltarán los automáticos y se cortará la corriente de forma inmediata, pero si no es así, es recomendable que nosotros mismos bajemos antes el interruptor general de la luz cortando la corriente, ya que aunque no se hayan producido chispas, es posible que al tocar el aparato el agua provoque el cortocircuito y las consecuencias sean muy graves.
Está claro que cuando se nos cae algo, la reacción inmediata es cogerlo, pero no siempre es recomendable , sobre todo si lo que se cae es un aparato enchufado a la red eléctrica.
En estos casos, la acción mas inmediata es tirar del cable eléctrico y desenchufarlo de la red eléctrica, o bien sacar el aparato del agua tirando del cable si está seco.
Lo mejor es sin duda, extremar el cuidado y evitar trabajar al lado o encima del agua.