Nuestras uñas están formadas por células muertas enriquecidas que contienen queratina, una proteína producida por el propio cuerpo que procede principalmente de los huesos en mayor o menor medida dependiendo de muchos factores.
Nuestras uñas crecen a un promedio de unos 5 milímetros al mes, aunque esta cifra varía mucho dependiendo de nuestra edad, nuestro estado de salud, el tipo de alimentación que llevamos e incluso las estaciones del año, así que no se puede generalizar y dar una cifra exacta del crecimiento, aunque si una cifra aproximada obtenida del cálculo de la media de crecimiento después de observar cientos de personas a través de diversos estudios.
Las uñas requieren un cuidado especial y sobre todo un corte especial, evitando dejar picos o astillas que puedan deteriorar la uña puesto que una vez que se deteriora tendremos que esperar que se renueve completamente al cabo de los seis u ocho meses.
Si llevamos las uñas pintadas, usaremos siempre un esmalte de calidad, y en el caso de que utilicemos uñas de gel y acrílico o esmaltes permanentes, nos las secaremos con un secador de uñas que funcione mediante lámparas de bajo consumo, como el Secauñas Giubra Flash que utiliza 4 de estas lámparas de tan solo 9 watios cada una y al cual se le puede dar un uso intensivo y profesional.
Un cuidado diario, cortarlas con tijeras cuticulares y cortauñas, la limpieza y pulcritud y un correcto pintado con esmalte de calidad ayudarán al mantenimiento perfecto de nuestras uñas para poderlas lucir en todo momento.